Ya lo decía hace un año y me temo que tengo que repetirlo, 2011 nos trajo preocupaciones y disgustos adicionales a los ya acumulados de calendarios anteriores. Pero en este caso con una calamidad añadida, creo, pues quienes tienen en sus manos la responsabilidad de sacar adelante a esta fiesta, parece que no se enteran de la llegada de unas míticas siete plagas que la atacan desde sus cimientos.
Encastes en proceso de extinción; condiciones monopólicas en el manejo de la que es en teoría la principal plaza de toros del mundo; una inoportuna y hasta cierto punto traicionera reivindicación de derechos de imagen de un grupo de toreros, algunos de los cuales, invitados hace algo más de una década a plantear lo que hoy reclaman, dejaron en la estacada a quienes lideraron ese movimiento y lo que me parece más grave, la absoluta desarticulación de los sectores que tienen intereses en el entramado taurino, para proceder a la defensa de la fiesta, hoy diana de múltiples ataques.
Ese es el horizonte inmediato que nos presenta el año que comienza en un rato más, esperemos que algo o alguien haga entrar en razón a quienes tienen una responsabilidad que va más allá de pagar su entrada para asistir a los festejos que se ofrecen en las plazas.
Por mi parte, yo deseo a todos Ustedes que el nuevo año sea mejor que el que está por concluir, que haya paz y armonía en su entorno y que tengan salud y trabajo, que teniendo eso, lo demás, como dice un amigo mío, como quiera que sea nos lo agenciamos. ¡Feliz 2012!
Feliz año, salud y suerte!
ResponderEliminarOselito: Gracias por volver por estos pagos, que hace tiempo que no te veía por ellos. Un abrazo y que las cosas caminen mejor en 2012.
ResponderEliminarXavier:
ResponderEliminarMuchas felicidades para ti y que se te cumplan esos buenos deseos y si queda algo, que también me lleguen a mi.
Un abrazo
Maestro XGF: Igualmente a Vd., muchas felicidades en este nuevo año. Gracias por tener vivo y activo este excelente sitio taurino. Y "a ver cómo nos la ingeniamos" pero la Fiesta Brava tiene que mejorar pese a los tenebrosos augurios que menciona.
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